Ciudad de México / Redacción.-
Eduardo, un mesero con años de experiencia en el rubro, compartió en una entrevista exclusiva con el creador de contenido Grusi algunas de las anécdotas más curiosas que ha vivido en su trabajo. Entre las historias que relató, destacó la ocasión en la que se llevó una sorprendente propina de 15 mil pesos en una sola noche de trabajo.
Eduardo explicó que, a pesar de las gratas sorpresas en forma de propina, ser mesero es un oficio extenuante que requiere un constante contacto con los clientes y una actitud amable durante todo el servicio. Sin embargo, resaltó que es una opción laboral ideal para estudiantes que buscan ganar dinero mientras se adaptan a sus horarios académicos.
La historia más destacada de Eduardo ocurrió durante una fiesta exclusiva, la cual describió como “la fiesta del hijo del dueño de FedEx”. Durante el evento, un invitado prometió una generosa propina si Eduardo lo atendía de manera excepcional. Este cliente llevó su propia botella de Blue Label y solicitó que el mesero la hiciera rendir al máximo.
Cada vez que Eduardo servía un trago al invitado especial, este le entregaba 500 pesos como muestra de su aprecio. El mesero decidió centrarse en atender exclusivamente a este cliente, lo que resultó en una ganancia de 12 mil pesos por su excelente servicio. Pero las sorpresas no terminaron allí; Eduardo también logró “pellizcar” propinas adicionales de algunos clientes que atendió esporádicamente durante la fiesta. Al final de la noche, su bolsillo se vio agraciado con un total de 15 mil pesos en propinas.
Esta anécdota resalta la importancia de la amabilidad y la atención al cliente en la industria de la hostelería, y muestra cómo, en ocasiones, un servicio excepcional puede recompensarse generosamente. La historia de Eduardo ilustra cómo, en medio de las largas y agotadoras jornadas laborales, los meseros pueden encontrar gratas sorpresas que hacen que su trabajo sea aún más gratificante.
Agencias / Vox Populi Noticias