La intervención fue rápida y sin complicaciones, ya que un bombero de Tampico se encargó de trasladar al cocodrilo juvenil a la comandancia, donde se seguirían los procedimientos correspondientes. Una vez bajo resguardo, el equipo de SOS Cocodrilo se encargó de monitorear al animal y marcarlo para llevar un registro de su salida de su hábitat natural.
Posteriormente, las autoridades de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA) y la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) lo recibieron y decidirán si lo regresan a la Laguna del Carpintero u otro sitio adecuado.
La presencia de cocodrilos en las calles cercanas a la laguna se ha vuelto más frecuente, por lo que se recomienda a la ciudadanía llamar al 911 en caso de avistamientos, para que personal capacitado, como Bomberos o Protección Civil, se encargue de la situación y evitar que la población se exponga a riesgos innecesarios.