Javier Gómez Núñez —responsable del cuarto turno en el Centro de Salud “Euzkadi” en Matamoros— compartió que los fines de semana y días festivos han atendido a varias personas afectadas por mordeduras de perro. También han visto casos de herpes, mejor conocido como “enfermedad de la víbora”. Sin embargo, el tema que más preocupa en este momento es el aumento de las mordeduras de perro.
Gómez Núñez señaló que, aunque esta región no ha registrado casos de rabia, recientemente confirmaron dos en México: uno en Oaxaca, donde murciélagos atacaron a dos niños, y otro en Colima por la mordedura de un perro.
En nuestra frontera, el escenario ha sido favorable, sin casos de rabia. Sin embargo, las autoridades sanitarias permanecen atentas por la cercanía con el Valle de Texas. Un área que alberga especies como coyotes y lobos, posibles portadores de esta enfermedad.
El encargado también advirtió que, además de la rabia, las mordeduras de perro pueden transmitir otras infecciones. Entre ellas, la riketsia, una enfermedad provocada por garrapatas que se transmite a los humanos y cuyas consecuencias muchas veces no se entienden en toda su magnitud.
Por Jorge Capetillo