Aunque no se tiene claro el origen exacto de esta tradición, muchos coinciden en que regalar flores amarillas el 21 de septiembre se popularizó gracias a la serie argentina Floricienta (2004-2005). En la serie, el protagonista entrega flores amarillas en esta fecha, lo que terminó marcando una tendencia que ha cruzado fronteras.
El significado de estas flores va más allá de su color vibrante. Regalar un ramo amarillo simboliza el deseo de compartir la vida con esa persona especial. Lo que ha dado a esta costumbre un valor muy simbólico no solo en Argentina, sino también en gran parte de Latinoamérica.
Si aún no tienes claro qué tipo de flores amarillas regalar, aquí te dejamos algunas sugerencias:
Girasoles: Con su gran tamaño y su capacidad de seguir al sol, los girasoles representan vitalidad y energía, perfectos para darle la bienvenida a la primavera.
Orquídeas: Estas flores aportan elegancia con sus formas únicas y colores variados. Son una opción sofisticada que le da un toque especial a cualquier arreglo floral.
Tulipanes: Con sus tallos largos y pétalos delicadamente curvados; los tulipanes simbolizan frescura y esperanza, lo que los convierte en un clásico atemporal para esta temporada.
Gerberas; Con sus colores intensos y vibrantes, las gerberas son ideales para transmitir alegría y optimismo, perfectas para celebrar la llegada de la primavera.
Lirios: Estas flores en forma de trompeta, con su fragancia suave; representan pureza y renovación, añadiendo una sensación de calma y frescura a cualquier ambiente.
Crisantemos: Abundantes y versátiles, los crisantemos aportan una explosión de color que ilumina cualquier espacio, siendo una opción sencilla pero efectiva para celebrar la estación.