Este “Viernes Negro”, los puentes internacionales en Matamoros se vieron abarrotados; tuvieron tiempos de espera de hasta tres horas. Los residentes locales y visitantes de otras ciudades cruzan la frontera para aprovechar las ofertas en el Valle del Sur de Texas.
Desde temprano, las filas de vehículos y peatones comenzaron a formarse en los accesos a los puentes. La escena contrastó con la del jueves, cuando los cruces internacionales estuvieron prácticamente vacíos.
En la avenida Álvaro Obregón —que conecta con el Puente Nuevo Internacional— los autos se extendían por varias cuadras antes de llegar al puerto fronterizo. Para evitar que conductores de calles cercanas intentaran “colarse” en la fila, un oficial de Tránsito Local estaba vigilando la vialidad.
Se espera que el alto flujo de personas en los puentes internacionales en Matamoros continúe durante el fin de semana; algunos comercios han extendido sus promociones.
Por Jorge Capetillo