La noche del 5 de enero es mágica para los niños. Quienes esperan con ilusión los regalos de los Reyes Magos. Pero más allá de la tradición, estos personajes tienen un profundo significado histórico y simbólico. Mismo que se remonta al relato bíblico y a diversas tradiciones culturales.
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El único texto que menciona a los Reyes Magos es el Evangelio de San Mateo. Aunque no detalla nombres ni cuántos eran, relata cómo unos sabios del Oriente, guiados por una estrella. Llegaron a Belén para adorar al “rey de los judíos”. Tras su encuentro con Herodes, hallaron al Niño Jesús en un humilde establo y le ofrecieron regalos llenos de simbolismo:
- Oro, que representa la realeza.
- Incienso, en alusión a su divinidad.
- Mirra, símbolo de su humanidad y sufrimiento.
¿Quiénes eran los Reyes Magos?
Aunque los evangelios no profundizan en su identidad, los Evangelios Apócrifos los describen como astrólogos o sabios que estudiaban las estrellas para interpretar eventos importantes.
En el siglo III, el padre de la Iglesia Tertuliano los relacionó con el Salmo 72, que menciona a los reyes de Sabá y Arabia trayendo presentes. Fue durante la Edad Media cuando se les dieron los nombres que conocemos hoy: Melchor, Gaspar y Baltasar, y comenzaron a ser venerados como santos.
Los Reyes Magos y su representación en el arte
Inicialmente, se les representó como nobles persas. A partir del siglo VIII, comenzaron a aparecer como monarcas con trajes exóticos, reflejando la diversidad de su origen:
Melchor, de Europa, con barba blanca y oro.
Gaspar, de Asia, joven y rubio, con incienso.
Baltasar, de África, de piel oscura y con mirra.
Además, simbolizan las etapas de la vida: la juventud (Gaspar), la madurez (Baltasar) y la vejez (Melchor). Su adoración fue un tema recurrente en el arte renacentista, recreado por artistas como El Bosco, Rubens y Velázquez.
En Europa, el 6 de enero era costumbre marcar las puertas de los hogares con las iniciales “GBM” como protección contra demonios. También se creía que pronunciar sus nombres al oído podía curar enfermedades como la epilepsia.
En México, esta tradición sigue viva con la celebración del día de Reyes cada 6 de enero, cuando los niños reciben los regalos que pidieron en sus cartas. Además, se parte la tradicional rosca de reyes, que da paso a otra tradición: el Día de la Candelaria el 2 de febrero.