Elaborar presupuesto personal mantenerlo al día puede sonar desafiante, pero con las herramientas correctas y un poco de disciplina, podrás tomar el control de tus ingresos y gastos. Este artículo te guiará paso a paso para que alcances tus metas financieras.
Pasos para elaborar un presupuesto personal y mantenerlo al día
- Analiza tus ingresos y gastos: Antes de hacer cualquier plan, necesitas saber cuánto dinero entra y cuánto sale. Revisa tus recibos, extractos bancarios o aplicaciones financieras para identificar tus gastos principales.
- Define tus prioridades: Separa tus gastos esenciales (renta, alimentación, servicios) de los no esenciales (entretenimiento, compras impulsivas). Esto te ayudará a tomar decisiones más inteligentes.
- Establece un porcentaje de ahorro: Lo ideal es ahorrar al menos el 20 % de tus ingresos. Si no es posible, empieza con una cantidad pequeña y auméntala progresivamente.
- Utiliza herramientas digitales: Existen aplicaciones que te ayudan a registrar y categorizar tus gastos. Así podrás llevar un control preciso.
- Revisa tu presupuesto regularmente: Dedica tiempo cada semana para ajustar y verificar si sigues cumpliendo tus objetivos.
La importancia de ajustar tu presupuesto según tus necesidades
Hacer un presupuesto personal no significa que debes ser más estricto o eliminar cosas, sino aprender a mantenerlo al día. Por ejemplo, si se te presenta una emergencia con el coche y tienes que repararlo, saber qué gastos puedes ajustar de forma temporal, mientras pagas las reparaciones. Se trata de aprender a ser flexible para mantener el control, pero sin estresarte.
¿Pagaste todas tus deudas o alcanzaste una meta de ahorro? Estos pequeños logros también merece que los reconozcas y puedes darte un gusto para celebrarlo. De esta forma, te mantienes motivado y refuerzas el hábito de llevar un presupuesto sin que sea algo tedioso y pesado.
¿Sientes que nunca alcanza? Descubre errores comunes y cómo evitarlos
¿Anotas absolutamente todo lo que gastas? Sí, incluir ese café o esos pequeños “gastos hormiga” es importante, porque justamente, en ellos es que puedes tener una fuga de dinero sin darte cuenta. Cuando te acuerdas y lo anotas para empezar a sacar cuentas, es que verás la enorme suma que representa en tu presupuesto.
No tener un fondo de emergencia, es uno de los errores más frecuentes y lo peor es que te genera más deudas de las que tienes ¿Cómo puedo empezar un fondo de emergencia? Empieza por destinar el 10% de tus ingresos y guárdalos en un lugar donde no tengas fácil acceso. Así evitas la tentación de usarlos con la promesa de regresarlos, porque sabemos que nunca pasa y terminas con las mismas dudas de siempre.
Finalmente, actualiza tus cálculos para que se ajusten a tu presupuesto personal y lo mantengas al día, no los modifiques si cambian tus gastos o ingresos. Ya que se trata de aprender cómo elaborar un presupuesto personal que puedas mantener y si lo modificas, pues ya rompes con la idea principal.
Hábitos diarios para elaborar y mantener tu presupuesto al día
- Registra tus gastos diarios: anota todo lo que gastas, desde la gasolina, hasta ese postre que te comiste en la mitad de la jornada de trabajo.
- Revisa tus cuentas bancarias: revisa varias veces al día tus movimientos en el banco y evita cargos inesperados. Sobre todo esos días en que realizas muchas compras, que es donde usualmente ocurren accidentes.
- Evita las compras impulsivas: ¿realmente lo necesitas o solo es un capricho? Si no lo necesitas no lo compres y si lo necesitas, pregúntate si puede esperar o no.
- Planifica tus compras: anota en una lista todas las cosas que te hacen falta antes de irte al supermercado, así evitas salirte de ella y comprar cosas innecesarias.
- Reevalúa tus suscripciones: Analiza si realmente usas todos los servicios por los que pagas. Cancelar lo innecesario puede ahorrarte bastante.