Con la veda ya levantada, los pescadores de Matamoros andan con la esperanza puesta en que este año sí se les haga buena pesca de camarón. Pero saben que para que eso pase, necesitan que caiga agüita del cielo pronto.
Miguel Torre Romero, quien está a cargo de la oficina local de la Comisión Nacional de Pesca y Acuacultura (CONAPESCA), comentó que normalmente logran sacar unas 1,200 toneladas al año, y esa es la meta que quieren alcanzar antes de que se termine el 2025. En la Laguna Madre, los camarones que más se dan son tres, el café, el blanco y el azul. De esos, el café es el que más se captura y el que más se consume, tanto en Matamoros como en otras partes del país.
El calorón, con temperaturas que rebasan los 35 grados, ha hecho que se evapore mucha agua. Eso hace que suba la salinidad y que los camarones se vayan más al fondo, donde cuesta más trabajo pescarlos a pesar de la veda del camarón ya levantada en Matamoros. Así lo explico Torre Romero.
Las lluvias no solo bajan la salinidad, sino que también traen nutrientes como fósforo, potasio y nitrógeno. Esos elementos ayudan a que crezca el fitoplancton y el zooplancton, que es lo que comen los camarones y otras especies. Para cerrar, comentó que si se logra un repunte en la pesca, no solo los camaroneros saldrán ganando, sino también otros productores de la región que dependen del mar para salir adelante.
Por Jorge Capetillo