Un día que comenzó como cualquier otro se transformó en una auténtica pesadilla para Maribel Mijangos, conductora del transporte escolar de la Secundaria 6 de Reynosa. Maribel sufrió graves lesiones debido a una explosión ocurrida en un domicilio cercano al plantel educativo.
El lunes 2 de septiembre, Maribel llegó al plantel para dejar a más de 20 estudiantes y se encontraba esperando a los alumnos del turno vespertino cuando un fuerte estruendo la sorprendió. La explosión fue causada por el acumulamiento ilegal de 200 kilogramos de pirotecnia en una vivienda cercana, lo que provocó que vidrios, pedazos de varillas y escombros volaran por los aires, impactando directamente el vehículo que conducía.
“Todo fue muy rápido. En realidad no lo esperaba, nunca me imaginé que algo así podría pasar, menos ahí en la escuela, ya que tenemos años trabajando y haciendo la misma rutina”, relató Maribel.
Después de la explosión, Maribel recordó: “Todavía estaba consciente, pero desangrándome ahí muy desesperada, no podía abrir la puerta porque todo el concreto cayó del lado del chofer”.
“Cuando pasó el impacto, que fue mucho escombro, muchas varillas. Quedó dañada la parte del chofer. Toda la estructura, las llantas, el vidrio de enfrente, entonces no podía yo abrir la puerta y me paré como pude, entre más escombros pude salir”, añadió.
Maribel sufrió lesiones severas, incluyendo parálisis facial, una herida de más de 10 centímetros en el cuello y una inflamación en el cráneo. Actualmente, se encuentra internada para recibir la atención médica necesaria.