Cuando se trata de cuidar nuestra salud mental, elegir un psicólogo adecuado puede marcar una gran diferencia. No es simplemente elegir un profesional cualquiera, se trata de conectar con alguien que entienda tus necesidades y pueda guiarte de manera efectiva en tu camino hacia el bienestar. A continuación, te ofrecemos algunos puntos clave:
Elige un psicólogo especializado en tu problema
El primer paso es identificar qué tipo de problema deseas abordar en terapia. No todos los psicólogos están especializados en los mismos campos, por lo que es importante buscar a alguien con experiencia en el área que necesitas.
Por ejemplo, si te enfrentas a un trastorno de ansiedad, la terapia cognitivo-conductual puede ser más útil, mientras que para problemas de pareja puede que prefieras a alguien que se especialice en terapia familiar o de pareja. Tener en cuenta esta especialización permitirá que el profesional sepa cómo abordar tu situación.
La psicología, como cualquier otra disciplina, se divide en áreas de conocimiento que profundizan en distintos aspectos del comportamiento humano, y un buen ajuste entre tus necesidades y las del psicólogo puede ser clave para avanzar en el proceso terapéutico.
La confidencialidad en la terapia
La relación entre paciente y psicólogo se basa en la confianza, y uno de los pilares fundamentales de esa confianza es la confidencialidad. Asegúrate de elegir un psicólogo que te explique claramente cómo maneja la privacidad de la información.
Saber que puedes compartir tus pensamientos más profundos y vulnerabilidades sin temor a que esa información salga a la luz es esencial para sentirte cómodo durante la terapia. Muchos profesionales te ofrecerán un contrato o una explicación detallada de sus políticas de confidencialidad en la primera consulta.
Si sientes alguna duda respecto a este aspecto, es recomendable aclararlo antes de iniciar el proceso, ya que la seguridad emocional es indispensable para abrirte en las sesiones.
Elige un psicólogo adecuado para tu edad
No todos los psicólogos trabajan con todas las edades. Al buscar ayuda, es esencial considerar a un profesional que tenga experiencia en tratar a personas de tu grupo etario.
Por ejemplo, un psicólogo especializado en niños o adolescentes puede no ser la mejor opción para un adulto que busca resolver problemas relacionados con el estrés laboral o los cambios en la vida adulta.
Del mismo modo, los problemas emocionales y psicológicos que atraviesa un joven pueden diferir ampliamente de los que experimenta una persona mayor, lo que significa que el enfoque de la terapia debe adaptarse a las necesidades específicas de cada etapa de la vida.
Considera la experiencia del psicólogo
La experiencia profesional del psicólogo es otro factor determinante al elegir un psicólogo. Aunque un recién graduado puede tener un enfoque fresco y actualizado, puede que prefieras a alguien que ya haya tratado con una variedad de casos similares al tuyo.
Esto no significa que un psicólogo más joven no sea competente, pero la experiencia aporta un bagaje adicional que puede hacer una gran diferencia en cómo se aborda el tratamiento. Investigar cuántos años lleva ejerciendo el psicólogo, o si ha tenido formación continua, puede ayudarte a sentir más confianza en su capacidad.
Además, es posible que algunos profesionales hayan trabajado en contextos distintos (hospitalarios, privados, centros comunitarios) lo que les permite ofrecer enfoques diversos en sus terapias.
Conoce el tipo de terapia que ofrece
No todos los psicólogos emplean los mismos métodos terapéuticos. Hay una variedad de enfoques, y es útil conocer cuál se adapta mejor a tus preferencias y necesidades. Entre las opciones más comunes se encuentran la terapia cognitivo-conductual, la psicoterapia humanista, el psicoanálisis, la terapia sistémica, entre otras.
Algunos enfoques se centran en cambios conductuales, otros en la relación que tienes con tus emociones, y algunos exploran más profundamente tu pasado. Hablar abiertamente con el psicólogo sobre su metodología te ayudará a decidir si es el enfoque adecuado para ti, y si te sientes cómodo.