Francisco Ponce Lara —coordinador de Socorristas de la Cruz Roja en Matamoros— comentó que las fluctuaciones térmicas de las últimas semanas han provocado un notable incremento en los servicios de urgencia. Este aumento se ha enfocado principalmente en personas con enfermedades crónicas como diabetes, hipertensión y afecciones respiratorias; se han vuelto más susceptibles ante estos cambios climáticos.
Ponce Lara detalló que una de las principales razones de este aumento en las emergencias es la interrupción de los tratamientos médicos por parte de los pacientes.
“Muchos pacientes nos han informado que dejaron de seguir el tratamiento recomendado por su médico, lo que ha provocado descompensaciones en su salud y los ha puesto en situaciones de riesgo”.
Aunque se anticipa un frente frío débil, el coordinador resaltó que las variaciones barométricas asociadas son suficientes para afectar a las personas vulnerables. Especialmente a los adultos mayores y aquellos con condiciones crónico-degenerativas. Además, destacó que los niños pequeños son particularmente propensos a descompensarse rápidamente ante estos repentinos cambios de temperatura.
Según Ponce Lara, antes de este aumento, la Cruz Roja atendía de 10 a 15 emergencias diarias vinculadas a pacientes con enfermedades crónicas. No obstante, en los últimos días esa cifra subió a 18. Se prevé que seguirá creciendo conforme avance el invierno, sobre todo si no se siguen las indicaciones médicas adecuadamente.
El coordinador de Socorristas de la Cruz Roja Matamoros hizo un llamado a la comunidad, sobre todo a las personas de la tercera edad y aquellas con enfermedades crónicas. Es vital que tomen medidas de precaución durante los cambios de temperatura.
Recomendó usar ropa adecuada para resguardarse del frío, evitar exponerse a bajas temperaturas por períodos prolongados. Además, de ser necesario, acudir a centros comunitarios donde puedan recibir apoyo nutricional; vacunarse con los biológicos correspondientes a la temporada.
“La prevención es clave. Seguir las indicaciones médicas y mantenerse protegidos del frío puede marcar la diferencia entre una complicación de salud o una recuperación sin problemas”.
Por Jorge Capetillo