Las lluvias del fin de semana trajeron alivio a los agricultores del norte de Tamaulipas, especialmente a los agricultores en Valle de San Fernando. Pese a que la humedad ha sido bien recibida, ahora deben lidiar con el exceso de agua en sus tierras.
En este momento, quienes cultivan sorgo y maíz comenzaron a drenar sus terrenos para evitar afectaciones. El secretario de Desarrollo Rural, Pesca y Acuacultura, Antonio Varela Flores, confirmó que las lluvias resultaron útiles para el desarrollo agrícola en la zona.
“Las lluvias tienen dos caras: la de las contingencias en la frontera, con sus efectos negativos, pero en la agricultura han sido muy beneficiosas. En San Fernando, los productores están incluso desaguando sus parcelas porque fue demasiado el agua”.
Se estima que el Valle de San Fernando tiene más de 700 mil hectáreas dedicadas a la siembra. Con los cultivos de sorgo y maíz, la cifra rebasa las 900 mil hectáreas para este ciclo otoño-invierno.
La humedad en el suelo permitirá que el sorgo entre pronto en fase de banderilla, un momento clave para su buen desarrollo. Asimismo, si se cumplen los pronósticos de lluvia en los próximos 10 días, la región podría asegurar una excelente cosecha.
“Si se cumplen los pronósticos, podríamos tener un segundo riego natural para los cultivos, lo que sentaría las bases para una gran producción en este ciclo”.
Por ahora, no hay reportes de pérdidas en las siembras. Sin embargo, las acciones preventivas no se detienen. Los agricultores en Valle de San Fernando actúan a tiempo para mantener el buen estado de las plantas.
“El agua ha sido benéfica, pero los productores están drenando el exceso para evitar que afecte el crecimiento de los cultivos”.
Por su parte, con un panorama alentador y el suelo en condiciones óptimas, los productores del distrito 010 esperan que este ciclo agrícola traiga cosechas abundantes y sin contratiempos.
Por Jordan Espinosa