La impunidad sigue marcando los crímenes de odio contra personas LGBT+ en Matamoros, denunció Francisco De la Rosa, representante del colectivo Matamoros se Viste de Arcoíris. Con voz firme, pero dolida, contó que los asesinatos siguen sin justicia. Según explicó, muchos de estos crímenes tienen tintes de odio, no solo por quiénes son las víctimas, sino por la manera en que les arrebatan la vida.
“Que yo tenga en memoria solamente se ha resuelto uno, pero volvió a salir libre la persona que encarcelaron; de ahí en fuera, ninguno se ha esclarecido”, comentó Francisco al hablar sobre los pocos avances en las investigaciones.
Durante la madrugada del martes, encontraron sin vida a una persona en una colonia de la ciudad. Se trataba de alguien perteneciente a la comunidad LGBT+. Este caso se suma a otro ocurrido hace algunos meses, donde una joven fue asesinada con un ladrillo en la avenida Cantinflas. Francisco reconoce que no lleva la cuenta exacta de todos los casos, pero sabe que han sido muchos crímenes de odio en Matamoros.
“De los anteriores no tengo un número exacto, pero sí han sido bastantes los crímenes de odio hacia la comunidad LGBT y pues no se ha hecho absolutamente nada”.
En varios de los casos recientes, los agresores eran personas cercanas a las víctimas, incluso sus parejas. Sin embargo, asegura que eso no cambia el trasfondo de violencia. Aunque se dice que hay más aceptación, él nota lo contrario en redes sociales y en los comentarios de la gente.
“Es con mucho coraje y mucho odio No entiendo porque hay tanta violencia en los comentarios cuando hay información de alguien de nosotros, o sea hay quien le va al América, hay quien le va al Cruz Azul o al Chivas y nadie les dice nada”.
A pesar del panorama, el activista reiteró que lo único que pide la comunidad es respeto. Antes de cerrar, hizo un llamado urgente a las autoridades:
“Claro que el respeto se gana y depende de cómo nos comportemos nosotros con los demás, yo siempre lo he dicho, no somos especiales, ni somos discapacitados, ni mucho menos. Somos como cualquier otra persona y pedimos lo mismo de la demás gente. Que se pongan las pilas” ante la gravedad de los asesinatos que siguen ocurriendo y que, hasta hoy, no han encontrado justicia.
