Tecamachalco, Puebla:
Localizaron a una joven sin vida en una alberca de un salón de fiestas del barrio La Villita en Tecamachalco, Puebla, luego de llevarse a cabo una “Fiesta COVID” clandestina.
La joven llevaba por nombre Sandra “N” y contaba con sólo 23 años de edad. Era madre soltera, y al parecer había acudido a una sesión de fotos para la que fue contratada, sin embargo murió de forma misteriosa.
La fiesta prohibida se convocó a través de redes sociales pese a la contingencia del coronavirus.
Los hechos ocurrieron en la calle 24 Sur entre la 7 y la 9 Oriente, hasta donde arribaron paramédicos del municipio de Tecamachalco. Sin embargo, los socorristas nada pudieron hacer para mantener con vida a la víctima, pues ya no presentaba signos vitales.
Se agregó que Sandra presentaba fracturas en las costillas y fue abandonada por quienes la contrataron.
Fue hasta un día después que se halló su cuerpo por los dueños del salón, quienes dieron aviso a las autoridades competentes.
Destrozados por la noticia, familiares de la joven madre hicieron el reconocimiento de cuerpo y les fue entregado para su cristiana sepultura.
De acuerdo con información de medios locales de Puebla, su muerte es un misterio, pues fue contratada como fotógrafa para el evento.
El caso se tratará como feminicidio
Según las investigaciones se dijo que en el salón “Villa Jardín” de la comunidad de La Villa, Tecamachalco, la joven fue arrojada a la alberca, donde sufrió fracturas y falleció presuntamente ahogada, por lo que fue abandonada cobardemente en el lugar, para evadir responsabilidades.
Agentes de la Fiscalía General del Estado (FGE) realizaron el levantamiento del cadáver que ingresó a la morgue para su necropsia de rigor, donde permaneció un día en calidad de desconocida hasta que fue reclamado el cuerpo.
A la vez, las autoridades competentes iniciaron con una carpeta de investigación para esclarecer el homicidio de la joven, quien además era estudiante universitaria.