En Reynosa, una creciente cantidad de familias migrantes extranjeras retornan a sus países de origen, después de que se suspendiera definitivamente la aplicación de CBP ONE. La herramienta que les daba la oportunidad de ingresar legalmente a Estados Unidos, solicitando asilo humanitario o político.
Son ya cerca de 200 familias las que han decidido tomar esta difícil decisión, ya que el sueño americano de reunirse con sus seres queridos parece lejano por el momento. Así comentó Héctor Silva de Luna, encargado del albergue Senda de Vida 1.
“Ustedes saben que el traslado de los migrantes es gratuito vía aérea donde el Instituto Nacional de Migración son los encargados de moverlos hasta el momento, sabemos los dejan en Villahermosa, Tabasco y posteriormente se conducen a los países centroamericanos”.
Es lamentable la situación de desamparo que enfrentan estos migrantes, quienes habían luchado por años para obtener una cita en CBP ONE. Solo para ver cómo la suspensión de la herramienta desmoronó sus esperanzas de reunirse con sus familias en suelo estadounidense. Así lo comentó el responsable del albergue.
Pero algunos migrantes que retornan a sus países no quieren hacerlo debido a las difíciles condiciones que enfrentaron en su lugar de origen, por ello, buscan nuevas opciones laborales en Reynosa. Allí se quedan en el albergue Senda de Vida, buscando un futuro mejor, lejos de la inseguridad.
La mayoría de los migrantes que se encuentran en esta situación provienen de Honduras, Guatemala, El Salvador, Nicaragua y Haití. A pesar de la presencia de migrantes venezolanos, rusos y cubanos, su número ha disminuido considerablemente desde que se conoció la suspensión de CBP ONE.
Por Yenni García Escobar