La noticia llegó directo desde el Vaticano y sacudió con emoción a la comunidad católica del norte del país: monseñor José Luis Cerra Luna, actual vicario general de la Diócesis Matamoros-Reynosa, ha sido nombrado nuevo obispo de la Diócesis de Nogales.
Fue el mismo rector de la Concatedral de Reynosa quien dio a conocer la noticia este viernes, en una conferencia de prensa, acompañado del obispo Eugenio Lira Rugarcia. Contó que se enteró de manera oficial hace apenas unos días, a través del Nuncio Apostólico. Monseñor Cerra no ocultó su sentir ante este nuevo camino que Dios le ha trazado como nuevo obispo de Nogales.
“El grado de responsabilidad que le da un obispo a su Diócesis, es muy definido y es muy claro, y por supuesto que yo creo que cualquier obispo se siente limitado ante lo que se espera, porque no dejamos de ser seres humanos, y tenemos limitaciones, y nos equivocamos, y pues yo creo que si el ejemplo o el modelo de un obispo es Jesucristo, pues yo creo que no llegamos ni a los talones”.
Con toda humildad, explicó que es precisamente esa sensación de limitación lo que ayuda a evitar caer en el orgullo o la autosuficiencia.
“Creo que Dios me fue preparando, pues desde mucho antes que empezar el proceso (de elección de obispo) me fue preparando desde que mis padres me fueron a bautizar, que estuvieron al pendiente de mi educación, no solamente escolar, sino religiosa y en el seminario, la formación es para formar presbíteros, sin embargo, pues de alguna manera, también lo es para estas tareas”.
Recordó su paso como formador de futuros sacerdotes, su participación en las tareas diocesanas y cómo su cercanía con los últimos tres obispos lo fortaleció espiritualmente. Desde su experiencia, monseñor Eugenio Lira Rugarcia resaltó el papel que la diócesis ha tenido en los últimos años, al aportar ya dos obispos a la Iglesia mexicana en apenas un lustro.
“Aunque yo digo, no estoy preparado porque la vocación es alta, pero también reconozco que Dios me ha ido preparando y me ha ido conduciendo hasta este momento. Hay diócesis más antiguas que la nuestra y que solo tiene un obispo y aquí en 5 años han salido dos, monseñor Margarito Salazar y ahora monseñor José Luis Cerra, ambos coincidentemente de parroquias dedicadas a Nuestra Señora de Guadalupe”.
Por ahora, aún no se tiene una fecha precisa para su llegada a la Diócesis de Nogales, aunque se espera que ese proceso se concrete en menos de tres meses. Mientras tanto, en Matamoros y Reynosa, su comunidad lo despide con orgullo, fe y gratitud.
Por Jorge Capetillo