La amigdalitis, esa inflamación dolorosa de las amígdalas, suele llegar acompañada de molestias en la garganta, fiebre y dificultad para tragar. Aunque los tratamientos médicos son necesarios en muchos casos, existen remedios caseros para la amigdalitis que pueden ser una ayuda eficaz para aliviar los síntomas y acelerar la recuperación. Continua y descubre los siete mejores:
Miel y limón: calmante y antibacteriano
La miel, conocida por sus propiedades antibacterianas y antiinflamatorias, es un aliado perfecto para calmar la garganta irritada. Al combinarla con el jugo de un limón recién exprimido, se obtiene un efecto potenciador: el limón aporta vitamina C, fortaleciendo el sistema inmunológico y ayudando a combatir la infección.
Basta con mezclar una cucharada de miel con el jugo de medio limón en un vaso de agua tibia y beberlo lentamente. Este remedio no solo calma el dolor, también ayuda a desinflamar y a reducir las molestias.
Gárgaras de agua salada: desinflamación y alivio
Hacer gárgaras con agua tibia y sal es una forma sencilla y rápida de reducir la inflamación. La sal actúa eliminando bacterias y disminuyendo la hinchazón en las amígdalas. Para prepararlo, disuelve media cucharadita de sal en un vaso de agua tibia, haciendo gárgaras con esta mezcla varias veces al día.
Este remedio también ayuda a eliminar el moco y otros desechos acumulados en la garganta, lo que alivia el dolor y permite respirar mejor.
Té de jengibre: poder antiinflamatorio natural
El jengibre, con su potente acción antiinflamatoria y analgésica, es uno de los mejores remedios caseros para la amigdalitis, ya que ayuda a combatir los síntomas. Prepara un té hirviendo unas rodajas de jengibre fresco en una taza de agua durante 10 minutos.
Luego cuélalo y, si prefieres, agrega un toque de miel para mejorar el sabor y potenciar su efecto calmante. Este té puede beberse dos o tres veces al día para reducir la inflamación y aliviar la irritación en la garganta.
Salvia y eucalipto: vapor de alivio inmediato
La combinación de salvia y eucalipto es ideal para un baño de vapor relajante que alivia la garganta y reduce la inflamación de las amígdalas. La salvia tiene propiedades antisépticas y antiinflamatorias, mientras que el eucalipto ayuda a descongestionar las vías respiratorias y facilita la respiración.
Para prepararlo, hierve agua en una olla y agrega unas hojas de salvia y unas gotas de aceite esencial de eucalipto. Inhala el vapor cubriéndote la cabeza con una toalla, permitiendo que el calor y las propiedades de las plantas actúen sobre la garganta.
Vinagre de manzana: antibacteriano poderoso
El vinagre de manzana es conocido por su capacidad para combatir bacterias y reducir la inflamación. Aunque su sabor es fuerte, realizar gárgaras con una mezcla de una cucharadita de vinagre en medio vaso de agua tibia puede ser muy eficaz.
Realiza estas gárgaras una o dos veces al día, especialmente si sientes que la amigdalitis es de origen bacteriano. Este remedio ayuda a desinfectar la garganta y a aliviar la irritación de forma rápida.
Ajo crudo: potente antiséptico natural
El ajo es otro de los remedios caseros para la amigdalitis, un antibiótico natural que ayuda a combatir infecciones y reducir la inflamación. Masticar un diente de ajo crudo puede ser un reto, pero vale la pena por su capacidad para aliviar la amigdalitis.
Si te resulta difícil consumirlo crudo, puedes picarlo y mezclarlo con una cucharada de miel, lo que hará más llevadero el sabor y aprovecharás ambas propiedades antibacterianas. Este remedio, además de ayudar a reducir la infección, fortalece el sistema inmunológico.
Té de manzanilla: relajante y antiinflamatorio
La manzanilla es conocida por sus propiedades relajantes y antiinflamatorias. Un té de manzanilla caliente no solo calma la garganta irritada, también reduce la inflamación de las amígdalas y ayuda a relajar el cuerpo, favoreciendo el descanso.
Simplemente prepara una infusión de manzanilla, deja que se enfríe un poco y bébela a sorbos. También puedes hacer gárgaras con este té, ya que actúa como un suave antiséptico natural que alivia la incomodidad en la garganta.