Ciudad de México / Redacción.-
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) informó hoy que la inflación al consumidor en México experimentó su primera aceleración desde enero pasado, poniendo un freno temporal a la convergencia hacia el objetivo del Banco de México (Banxico).
Según los últimos datos actualizados, el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) mostró un aumento mensual del 0.64 por ciento en noviembre, lo que resultó en una tasa de inflación anual del 4.32 por ciento. Esta cifra marcó un incremento desde el dato del 4.26 por ciento anual registrado el mes anterior y la primera aceleración en casi un año.
El mercado había anticipado esta aceleración, posponiendo así la convergencia al objetivo de Banxico de mantener la inflación en un 3 por ciento +/- 1 punto porcentual hasta finales del próximo año. Aunque la inflación había experimentado una desaceleración en meses anteriores, los analistas advirtieron que a medida que se acercaba al objetivo del banco central, se volvería más difícil mantenerla a la baja.
En medio de esta preocupación, el Banco de México mantiene su tasa de interés en un récord del 11.25 por ciento para combatir los niveles elevados de inflación.
El informe del INEGI reveló que, en términos de inflación subyacente, las mercancías continúan siendo la principal fuente de presión, con un aumento anual del 5.33 por ciento, mientras que los servicios aumentaron un 5.28 por ciento. En consecuencia, la inflación subyacente, que excluye los bienes y servicios con precios más volátiles, se ubicó en un 5.30 por ciento.
En cuanto a la inflación no subyacente, registró una tasa del 1.43 por ciento, con un aumento del 2.85 por ciento en los precios de los productos agropecuarios y un incremento del 0.24 por ciento en los energéticos y tarifas autorizadas por el gobierno. Estos datos indican la persistencia de presiones inflacionarias provenientes de sectores clave de la economía mexicana.
Agencias / Vox Populi Noticias