En la décima sexta sesión regular del Comité de Monitoreo y Evaluación del Semáforo del Cuidado del Agua, se confirmó que Nuevo Laredo sigue en estado de alerta máxima respecto a la escasez de agua.
Previamente a esta advertencia, la Comisión Internacional de Límites y Aguas (CILA), sección Nuevo Laredo, comunicó que el nivel del río Bravo está bajo; alcanza apenas 39 centímetros de profundidad. No obstante, aseguraron que estos niveles son suficientes para abastecer a las plantas potabilizadoras.
Silvia Ariadna Fernández Gallardo Boone —Gerente General de la COMAPA— expresó su preocupación; señaló la falta de una cultura de conservación del agua.
“El consumo de agua no ha disminuido, y eso que no hace mucho calor. Estamos siendo muy conscientes de que se nos hace muy fácil girar la perilla y tenemos agua mientras que en otras ciudades no hay. Un ciudadano promedio gasta 400 litros diarios cuando debería gastar únicamente 100”.
Para sensibilizar a la población sobre la escasez de agua en Nuevo Laredo, COMAPA implementa diversas iniciativas. El equipo de Cultura del Agua visita diariamente escuelas y lugares de trabajo; promueven así prácticas para el uso responsable del recurso.
Fernández Gallardo Boone añadió que COMAPA impone una multa de 2 mil pesos a quienes desperdicien agua. Además, las sanciones municipales podrían ascender a más de 10 mil pesos.