Nicolás Maduro juramentó este viernes como Presidente de Venezuela para el periodo 2025-2031. La ceremonia se llevó a cabo en la Asamblea Nacional (AN), controlada por el oficialismo, mientras la oposición, liderada por Edmundo González Urrutia, insiste en que fue el verdadero ganador de las elecciones de julio pasado.
“Juro por el histórico, noble y aguerrido pueblo de Venezuela y ante esta Constitución, que haré cumplir todos sus mandatos”, declaró Maduro ante el presidente del Parlamento, Jorge Rodríguez, en una ceremonia rodeada de simbolismo chavista.
Nicolás Maduro toma posesión en Venezuela bajo la sombra de una elección controvertida
Al llegar al Legislativo, los cadetes de la Academia Militar recibieron al mandatario con honores militares, mientras la primera dama, Cilia Flores, la vicepresidenta Delcy Rodríguez y delegaciones internacionales lo acompañaron.
Entre los invitados destacó el presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, quien asistió para respaldar a Maduro. También llegaron representantes de países como Rusia, Bielorrusia y Uganda. Sin embargo, mandatarios de naciones vecinas como Colombia y Brasil optaron por no asistir, cuestionando la legitimidad del proceso electoral.
Tensión en la frontera con Colombia
El cierre de la frontera con Colombia y del espacio aéreo venezolano por 72 horas fue anunciado como medida preventiva. Según el gobernador del estado Táchira, Freddy Bernal, la decisión respondió a una supuesta “conspiración internacional” en vísperas de la toma de posesión. Por su parte, Colombia aseguró que sus fronteras permanecerán abiertas y reiteró su postura de desconocer los resultados electorales.
Una oposición firme y un país en crisis
Edmundo González Urrutia, el principal candidato opositor, asegura tener pruebas de su victoria con más del 70 por ciento de los votos. El gobierno de Estados Unidos respalda estas declaraciones. Mientras tanto, las autoridades retuvieron brevemente a la lideresa opositora María Corina Machado y la obligaron a grabar videos en los que afirmó estar bien, según miembros del partido Vente Venezuela.
El nuevo mandato de Maduro enfrenta desafíos significativos. Aunque la inflación y la escasez de alimentos han disminuido, millones de venezolanos siguen viviendo con salarios mínimos de menos de tres dólares al mes, lo que ha llevado a más de 7.7 millones de personas a emigrar en busca de mejores oportunidades.
Un futuro incierto
Maduro anunció que su gobierno podría iniciar una reforma constitucional, aunque no ofreció detalles. Además, las leyes aprobadas recientemente por el Parlamento oficialista buscan restringir la actividad política opositora y regular a las ONG. En el ámbito económico, el gobierno ha adoptado medidas más ortodoxas para controlar la inflación, mientras celebra lo que califica como “resistencia” frente a las sanciones internacionales.