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Un grupo de padres, en su mayoría hombres, hacen protesta en juzgados familiares de Altamira. Pertenecientes a la asociación No más Hijos Rehenes, los inconformes exigieron respuestas ante presuntas irregularidades que les han impedido convivir con sus hijos.
Los manifestantes mostraron pancartas con mensajes que evidenciaban sus denuncias. En algunas cartulinas, incluso, aparecían fotografías de juezas y acusaciones de presunta corrupción. Asimismo, señalaron que han sido víctimas de procesos injustos, con falsas denuncias y decisiones que, según ellos, carecen de sensibilidad. Algunos de ellos llevan meses, incluso años, sin poder ver a sus hijos.
“No hemos cometido ningún delito, solo queremos convivir con nuestros hijos. Nos han arrebatado su infancia y convertido en criminales sin causa”, expresaron.
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También señalaron deficiencias en el personal del Cecofam, el único espacio donde pueden ver a los menores una o dos veces por semana. Argumentaron que la falta de preparación de los encargados afecta el bienestar de los niños.
“Nuestros hijos no son un negocio ni una moneda de cambio, son nuestra familia”.
En la protesta en juzgados familiares de Altamira solicitaron la intervención del gobierno estatal, pues aseguran que al menos 67 familias del sur de Tamaulipas viven esta misma situación.
Por Otilio Núñez Tovar
