La mini-brigada médica en la Casa del Indigente en Reynosa fue un rotundo éxito; gracias a la amplia participación de personas de escasos recursos y residentes permanentes. Ahora, están en busca de padrinos para cubrir las necesidades de mantenimiento del lugar.
Graciela González, encargada del recinto, señaló que los asistentes disfrutaron de servicios de salud y vacunación proporcionados por el módulo de la Jurisdicción Sanitaria número 4 —incluyendo dosis contra la influenza, tétanos y hepatitis— para prevenir enfermedades.
Además, se ofrecieron cortes de pelo y comidas en la Casa del Indigente —con consultas médicas y baños previos para retirar el cabello de la ropa—. Un total de 40 personas aprovecharon esta oportunidad, sumándose a los 14 residentes permanentes, quienes también recibieron donaciones de ropa. Asociaciones civiles entregaron víveres, medicamentos y otros beneficios.
Ahora, la Casa del Indigente busca padrinos para adquirir materiales como impermeabilización, aires acondicionados, pintura y realizar una limpieza general del inmueble. También necesitan camas con colchones integrados para los residentes y visitantes que deseen descansar.
Otro problema constante es la falta de agua. Si alguien desea donar una bomba con instalación y tinaco, se lo agradecerán mucho; es difícil prestar un buen servicio sin los suministros básicos.
La Casa del Indigente se ubica en el bulevar Luis Echeverría, esquina con Aquiles Serdán, en la calle 20 de noviembre.