Este 2025, el inicio de la temporada de huracanes en el Atlántico encendió las alarmas en Tamaulipas. De acuerdo con el nuevo informe de la Universidad Estatal de Colorado (CSU), existe un 55 % de probabilidad de que un ciclón tropical impacte directamente el estado.
Con playas extensas y un largo historial de ciclones, el riesgo no es un dato menor. El pronóstico también revela que hay un 32 % de posibilidad de que un huracán llegue a tierra firme tamaulipeca. Aún más preocupante, el 12 % de probabilidad corresponde a huracanes mayores, es decir, de categoría 3, 4 o 5.
“Traducido en lenguaje claro: uno de cada tres huracanes que se formen este año podría pasar a menos de 80 kilómetros de nuestras costas”.
El análisis considera como “impacto” todo ciclón que pase a menos de 80 kilómetros de una región determinada. Este escenario pone en riesgo a municipios costeros como Tampico, Soto la Marina, San Fernando y Matamoros. Pese a ello ―como siempre― los fenómenos naturales mantienen su impredecible naturaleza.
Huracanes Tamaulipas 2025: riesgo crece con aguas más calientes
El pronóstico se vuelve más preocupante considerando las condiciones actuales. El Atlántico está más caliente de lo habitual, y la transición de El Niño a La Niña podría empeorar la situación. Asimismo, el calentamiento global juega su parte, empujando esta temporada fuera de los patrones normales.
De acuerdo con la CSU, el panorama general para 2025 prevé 17 tormentas tropicales con nombre, 9 huracanes y 4 huracanes mayores.
Este comportamiento convertiría a la temporada en una de las más intensas que se han registrado. Por lo mismo, los especialistas enfatizan:
“Tamaulipas, por su ubicación estratégica frente al Golfo, vuelve a estar en la línea de riesgo”.
En 2024, los modelos predecían una temporada hiperactiva y, aunque hubo daños, también llegaron lluvias que ayudaron a mitigar la sequía histórica. El sistema lagunario de Tampico ―que estuvo al borde del colapso en 2024― logró recuperar sus niveles gracias a las lluvias.
La memoria de los tamaulipecos aún conserva cicatrices de huracanes pasados como Alex en 2010 e Ingrid en 2013, que provocaron deslaves, desbordamientos y fuertes daños.
Por su parte, hasta el momento las autoridades estatales no han anunciado medidas de prevención específicas, aunque se espera que pronto actualicen protocolos de emergencia y habiliten refugios temporales.
Por Jordan Espinosa